Placeres de la vida (+18)

Esa noche después de arreglar las cosas con el encargado de mi bar, salí un rato necesitaba eso que necesitaban todos demonios, ángeles, nephilim,si un polvo y no como otros sino de alguien que llevaba tiempo esperando ya que había salido de la ciudad ha hacer algún que otro trabajo para el jefe,era con la única persona que sabia perfectamente que era solo sexo de lo mejorcito,solo los demonios como yo y ella sabíamos lo que era el placer sumado a la maldad que algunas veces corría por las venas por nuestros compañeros.

Me puse mi cazadora negra cogiendo el coche hacia el mirados allí era donde siempre nos reuníamos que no significaba que acabásemos los dos allí por que ella era una caja de sorpresas,arranque el coche el único amor que sabia que no tenia que ver con cualquier historia,cuando llegue lo aparque en un descampado cercano y me fui al punto mas alto del mirados,esperando a que viniese, encendí un cigarro como de costumbre y me quede mirando hacia la ciudad,pensando en que pensaban los humanos sintiéndose seguros por tener armas y todo eso,eran insulsos y no sabían que estaban rodeados de personas como yo que acabarían con su vida.

Expulse el humo mientras me sentaba sin pensar quería dejar la mente en blanco y esperar a Sheeba.

¿Sexto sentido?¿instinto? No sé bien como llamarlo, solo sentía ganas de dar un paseo. Es por eso que después de darme una ducha tomé un vestido ligero y cómodo para luego tomar el automóvil y partir donde sea. No tenía ganas de ver a multitudes ni fiestas ni nada por el estilo solo quería dar un paseo, fue así como casi por inercia terminé encaminándome hacia el mirador, era un bello lugar para pasar el rato bebiendo y fumandose un cigarrillo, en el caso que estuviese sola, si no se tornaría aun mejor.

Bajé del auto con una cerveza en una mano y una cajetilla de cigarrillos en la otra y caminé hacia la cima del mirador tomando con los labios uno de los cigarrillos, blasfemé al recordar que no tenía fuego pero fue ahí cuando vi una figura a unos metros, una bella figura masculina recia, se me vino alguien a la mente, el recuerdo se aclaró cuando visualicé ese hermoso trasero.

"Drake" Pensé sonriendo de una forma insinuante y me acerqué mas a él, parece que la noche sería mas divertida que lo que tenía presupuestado, guardé la cajetilla en un bolsillo y tomé entre mis dedos el cigarrillo para luego aparecer a un lado del muchacho con una gran sonrisa seductora.

- Cuanto tiempo, cielo. - susurré mientras cambiaba la botella de mano para luego darle un agarrón en el trasero.

- ¿Tienes fuego? - pregunto con voz susurrante móstrandole el cigarro entre mis dedos.

Después de un rato pensando y acabado mi cigarro, volví un momento al coche para coger la cajetilla y alguna que otra cosa que necesitaba esa noche,algunas que otras que había olvidado cogerlas,cuando volví me quede mirando a una parejita de lejos,y sonreí malicioso sin sentarme,esperando y teniendo la esperanza de encontrarme con quien quería ver en ese momento.

Para mi sorpresa no tardo mucho en venir o en aparecer,no es que nos llamásemos por que no lo necesitábamos ya que siempre o casi siempre ambos nos dirigíamos al mismo lugar esperando por el otroo y esa noche Sheeba no me defraudo,sin mirar hacia ella me llego ese olor que solo ella tenia,un olor que hizo que sonriese como niño con juguete nuevo,note como se acercaba sinuosa como solía hacer ella,era tan sexy que algunas veces pensaba en sentir algo por ella,pero yo mismo me contrariaba,era puro sexo y de lo mejorcito.

Note como me cogió el culo y sonreí mirándola, observándola con gran satisfacción cada día estaba mas buena-Eso mismo digo yo,donde andas preciosidad-la mire fijamente sacando mi mechero para encenderle el cigarrillo, encendiendoselo y cogiéndola de la cintura dándole la vuelta para pegarla a mi,oli un poco su perfume-como te ha ido-y le pasa las manos por la cintura sinuoso.

Por supuesto, ahí estaba Drake para satisfacer mis deseos, desde unos tan simples como encender mi cigarrillo hasta otros mas oscuros y lujuriosos. spy una calada al cigarrillo mientras él me gira y siento su cuerpo pegado al mio escuchando sus palabras, con mi mano acaricio su mejilla hechando la cabeza hacia atrás.

- Bueno yo aquí esperando ver esos ojos hermosos nuevamente. - susurro con voz cálida acariciando su mejilla y rozando con mis labios su mentón. Luego me giro quedando de frente a el y comienzo a palpar sus bolsillos de una manera insinuante tocando un poco, pero solo levemente mas allá para luego sacar sus llaves y con ellas destapo mi cerveza y las dejo en su bolsillo de nuevo, doy un trago a mi cerveza y me relamo los labios fijando mi mirada en la suya.

- Y tu, amor. Tan desaparecido que estás. - digo con un tono de lamento algo coqueto y bajo mi mano por su torso bien formado.

- Te extrañe. - murmuro con voz ronroneante acercándome a su cuello rozándome en su piel tan cálida y suave, piel que y había probado en mas de una ocasión, un sabor adictivo.

Seguí acariciando esa cintura tan delicada que tenia hasta que se giro y pude ver esos ojos oscuros que quitaban el hipo a mas de un humano, ángel ,hasta algunas veces a mi,tan peligrosa,como si de una diosa se tratase,esa rebeldía me volvía loco,y sentir que su mano pasaba por mi mejilla,me hizo sonreír complacido,ella como toda chica tenia sus caricias delicadas y sutiles,como podía ponerme tan cachondo con cada toque que hacia.Ella ya sabia que hacer para conseguir lo que quería.

-Pues aquí me tienes para que los contemples toda la noche si quieres,como siempre te ha gustado-la mire sinuoso mientras sentía como sus manos se movían inquietas por donde estaba mis bolsillos,me dije interiormente que no caería en sucias redes de Sheeba por que la ultima vez al minuto dos ya le estaba quitando la camiseta, perdón arracandosela sin piedad,pero la mire pasando de su toqueteo sinuoso,esos labios,esa lengua,no se me escaparan esta noche.

-Estoy desaparecido por que no me necesitas,ademas ahí muchas angelitas para hacer caer al zumo infierno,ademas el bar tengo que probar toda la mercancía nueva-note como su mano bajaba lentamente por mi torso y no pude evitar sonreír de lado mirándola fijamente,al oír ese "te extrañe"y notar ese ronroneo cerca de mi ,mis manos se fueron a su trasero apretándoselo atrayendola a mi-Te diría lo mismo preciosa pero yo no soy de esos-la mire fijamente profundizando en sus ojos-Y dime no me das cerveza-le susurre en el oído pasando una de mis manos por su cuello retirando su cabello y dándole un beso en la nuca.

Una vez mas observé sus hermosos ojos complacida, este demonio siempre me complacía y sorprendía. Sus manos me estrecharon pegandome a su cálido cuerpo y así haciendome sentir su deseo, me gustaba y mucho. Ronroneo con una expresión de decepción notoriamente sarcástica y me llevo el cigarrillo a mis labios dándole otra calada.

- Me dejaste por tus angelitas estúpidas. - digo en un tono drámatico para después dibujar na sonrisa salvaje, a quien engañaba, los celos no era algo que me viniera bien, lo mio era lo momentáneo ojalá solo una vez, claro que con Drake una vez no me era suficiente, ya habíamos aprendido a conocernos y a siempre coincidir cuando uno necesitaba del otro, pero jamás nada mas allá de eso.

- Apuesto que ninguna de ellas te hace sentir lo que te puedo hacer sentir yo, mi bello ángel oscuro. - paso mis manos por detrás de su cuello acercándo mi boca a las suya, solo rocé levemente mis labios provocándol, jugando al dar y quitar, me alejo pero sin antes darle una mordida en su labio inferior.

El me pide cerveza, llevó la botella a mis labios dando un trago y dejando que se me derrame por el cuello y terminando por el escote, lo miro con cara de reto.

- Adelante... - alzo una ceja sonriente.

Baje mi mano denuevo a su trasero ya que se estaba mejor,tan blandito y sabroso como lo tenia ella, oírla escuchar diciendo eso de las angelitas que cada día ocupaban mi cama o yo ocupaba las de ellas,me pareció celos pero en ella no me encajaba y nunca me encajaría ya que solo era sexo del bueno,asi que volví a mirar a los ojos viendo esos ojos de diablesa que tenia.

-Es mi trabajo hacer que caigan ademas,estoy aquí no,disfrutando de lo que necesito de verdad,verdadero sexo no de peliculita absurda de principitos-la oí nombrar que ella era mejor que cualquier otra y en algo tenia razón ella era lo mejor que me había tirado en mucho tiempo,y ya me estaba creando independencia de domarla en la cama o en cualquier otro sitio cómodo o que pillásemos.

-Si te digo la verdad no ya que eres indomable pero ya estoy cogiendo las claves para hacer que te derritas como esas angelitas-sus manos se fueron a mi cuello acercando su boca a la mía, apartándola mordiendo mi labio-Veo que hoy estamos mas calientes que otros días-vi como bebía cerveza y se la derramaba por el escote y la mire sinuoso sonriendo y cuando me dio el pistoletazo de salida ,solo hizo lo que el cuerpo y todo me pedía.

Me acerque a ella pasando mis manos por su cintura inclinandola ,haciendo que ella ladease la cabeza para quitar su cabello,asi poder lo que tanto ansiaba la mire y baje hasta su cuello besando primero para después pasar la lengua saboreando no tanto la cerveza sino su piel que muchas veces la había probando pero en ese momento me gustaba mas,baje lentamente llegando a su escote y con un movimiento la cogí haciendo que levemente se sentase en un muro cercano para poder quitarle unos botones de la camiseta que me impedía ir a donde la cerveza no había llegado,me pare cuando ya le había quitado la camiseta y una de mi manso estaba dentro de su brasier y levemente la saque-Mmm si muy buena la cerveza servida asi,me encanta-la mire acercándome a ella para que sus piernas rodeasen mi cintura, pasando mis manos por su cuello, acercándome a sus labios para besarla juguetean con su lengua.

Río cuando comienza a decir lo que espera de mi, era claro, yo no me iba con rodeos de sexo de película, a mi me gustaban las cosas poco comunes y si no es así ¿que diversión tendría? Sus manos volvieron a internarse por mi cuerpo mientras sentí una vez mas esa adrenalina, esas ganas de sentir su cuerpo unido al mio que tanto placer me daba.

- Pequeño ingenuo, conmigo no soy yo la que se derrite, ...eres tu. - vuelvo a sonreír y en especial cuando decía que hoy estaba mas "caliente" y es que no habían dias especiales, siempre era así. Ahora mi ansiedad estaba aumentando cuando él me acorrala contra una pared, sabía lo que se venía y me encantaba, cerré solo los ojos cuando empecé a sentir como sus labios besaba y lamían mi piel hasta internarse en el escote y fue así como aprovechó a deshacerse de algo de la ropa que llevaba.

Gemí y llevandome el cigarrillo a los labios una vez mas terminé por apagarlo en la pared y lanzarlo lejos. Bebí otro poco de la cerveza y tomé el rostro de Drake para dejarle lo último de la bebida en los labios para luego lanzar la botella también, ahora tenía mis manos libres y mi pequeño demonio no se salvaría. Lo primero que hice fue arrancarle la camiseta que llevaba puesta y así poder deleitar mis ojos con su cuerpo bien formado, tan atrayente.

- Pero mira si te conservas bien, estas tan delicioso como la última vez. - sonrío seductora deslizando mis manos por su torso, llevé mis labios a su cuello una vez mas para bajarlos por su pecho, me detuve entre mordidas y lamidas para seguir por su vientre, delicioso y mis manos acariciaron sus muslos por encima de la ropa intensamente hasta comenzar a desabrochar su pantalón.

Seguí acorralándola contra la pared,no había disfrutado del sexo al aire libre pero ahora con Sheeba experimentaría un poco ya que no me movería,por que ya mi poll* estaba esperando entrar en ella con mucha esperanza, sabíamos que esa noche lo haríamos asi que a mi los preliminares no me daban anda sino ir directamente al grano de la cuestión.

-Eso habrá que verlo,por que no dirás después de hacerlo eso-vi como se acabo de fumar el cigarrillo y el poco de bebida me lo dio por medio de un beso y como estaba entretenida arrancándome la camiseta como siempre hacia se deleitaba haciendo eso y como miraba deseosa al ver mi torso,mis manos se deslizaron quitandole el brasier para ver sus pechos tan blanditos,tan apetecibles, la oí decir algo y la mire.

-Tu sigues tan rica como siempre-la vi bajarse besando desde mi cuello para abajo mordiendo también,como sabia que me quedaría petrificado del gusto,le ayude a desabrochar el cinturón pero la cogí para que subiese pegándola duramente a la pared cuidando que no se hiciese daño,para besarla en los labios bajando por su cuello ,llegando a sus pechos cogiéndolos, mirandolos para consiguiente empezar a besarlos y mordisquearlos, mientras una de mis manos se metían en sus pantalones mas bien en sus braguitas notando su sexo en mi mano.

No puedo evitar sonreír mientras niego con la cabeza, Drake siempre tan egocéntrico creyendo que es lo mejor del mundo y quien podía negarlo si entre las primerizas que frecuentaba no tenían mucha mas experiencia como para dejar de encontrarlo como lo mejor que les ha pasado en sus inútiles vidas. Por mi parte a pesar que no podía decir que estuvo mal, estaba dentro de mis expectativas pero hace tiempo que no encontraba nada novedoso que me hiciera sentir esa adrenalina exquisita cuando se combina con un buen polvo. Vuelvo a sonreír cuando me tira el humo pero hago un además con la mano apartando el humo.

- No me tires tu basura. - comento quitándole el cigarrillo de su mano para llevarlo a mis labios y así aspirar por mi cuenta. Me levanto del suelo y cojo su camisa para ponermela yo encima, una buena estrategia para cubrir mi cuerpo y evitar que el cubra el suyo.

- Y no seas tan ególatra cielo, no eres lo mejor del mundo. - continuo diciendo dándole otra calada al cigarrillo pensativa, no me gustaba subirle el ego a nadie que no fuera mi misma aunque debía admitir que no era malo mas bien todo lo contrario. Voy a buscar mis prendas que estaban regadas por el piso.

Tan creída como siempre mi querida Sheeba con su ego como una cosa,esa era ella,lo bueno que para lo que la quería para algo follar,por que como novia no me gustaría y menos una demonia como ella,ademas yo no era un puto romántico ni nada parecido,vi como me quito el cigarrillo,la vi cubrirse nose por que coño hacia eso siempre cubrirse para que yo no me cubriese.

-Pues si no soy el mejor del mundo que haces el suelo aquí,cuando hace apenas unos minutos gemías-la mire con una mirada dura y me levante quitandola encima de mi,cogiendo mis pantalones y mis bóxer, poniéndomelos mientras la miraba-puedes quedarte con el cigarrillo,ha estado bien,no estupendo pero que se le va a hacer-me acerque a morderle el cuello dejando una pequeña marca.

-No se lo que tienes que hacer esta noche asi que,yo mejor me voy,necesito hacer caer a otro angelitas-me coloque los zapatos y me levante sin abrochar mi camiseta , cogiéndole las prendas a ella-no vayas dejando tu ropa por aquí Sheeba-la mire encendiendo otro cigarrillo pensativo.

Me coloqué la ropa en silencio con el cigarrillo entre mis labios, mas bien ignorándo las palabras de Drake que al parecer había hecho una herida en su ego, pero que podía decir, no era la clase de chica que halagara a un hombre aunque fuese el hombre perfecto... y es que no había conocido al hombre perfecto y no creía en su existencia, jamás había sentido con ello verdadero placer de amar a alguien.

- Como si no me hubiese quedado con el cigarrillo si tu no dijeras "puedes quedartelo" . Como si no supieras que siempre obtengo lo que quiero. - una vez vestida camino para observar mejor la hermosa vista a la ciudad que se tenía desde aquí. Ignoré la mitad de las palabras de Drake, para que molestarse en oír a su ego herido hablando, ahora mi mirada estaba perdida entre las luces que iluminaban la ciudad nocturna.

- No dejes que tu ego controle tus palabras, cielo. - solo digo sin despegar mi mirada del espectáculo luminoso mientras continúo fumando placentera el cigarrillo entre mis dedos.

La escuche y sonreí irónico siempre era asi algunas veces me cansaba su forma de ser, tan caprichoso haciendo lo posible para estar agusto con ella misma y darse gusto cuando quería,era la única mujer que lograba eso en mi,pocas o ninguna lo hacían también y mi ego masculino no iba a ser herido por como decía muchas veces un polvo de los que valían la pena en muchos momentos y con ella mucho mas.

-Eres una niña caprichosa o mejor dicho una demonia con caprichos de humanos,a todos nos queda algo humano a ti los caprichitos-expulse el humo y la mire poniéndose la ropa de que me servia pelearme con ella si era una de las mejores digamos amigas entre comillas para hacerlo donde fuese.

-No habla mi ego ,habla mi cabeza y mi cabeza dice que te apetece una cerveza,o que no puede ser ya que algunas veces ustedes las mujeres sois inconstantes-le guiñe un ojo y tire lo que queda de cigarrillo tocándole el cuelo y yendo al coche en busca de cervezas.